La Geometría Sagrada es el estudio de las formas geométricas y sus relaciones metafóricas con la evolución humana, así como la transición de un estado de conciencia a otro, es decir, la forma de abrir el corazón y evolucionar la conciencia a través de los modelos geométricos. Las verdaderas formas de Geometría Sagrada nunca se estancan; están en constante trascendencia, fluyendo y cambiando (evolución o involución) de una forma geométrica a otra, a su propia velocidad o frecuencia. Es un proceso que perdura y se sostiene en el tiempo. La Geometría Sagrada es el modelo de la creación y engendra toda la forma.
Todo en el universo proviene de una misma fuente o Inteligencia Universal, que algunos llamamos Dios, o Madre Naturaleza, o Gran Espíritu, y la Geometría Sagrada nos demuestra, con conceptos que puede captar nuestra mente racional, cómo todo lo que existe fue creado por medio de los mismos principios básicos, cómo desde un simple átomo hasta una inmensa galaxia siguen un mismo patrón geométrico idéntico.
En muchos minerales, vegetales y animales aparecen triángulos, círculos, hexágonos, elipses y espirales. Pero desde el conocimiento de estas formas pseudogeométricas concretas hasta la creación de las nociones abstractas, fundamentalmente de la Geometría, transcurrieron centenares de miles de años: el tiempo necesario para que la mente reconociese las semejanzas entre las figuras naturales concretas y supiese agruparlas en unos cuantos tipos fundamentales.
Así, el Universo se va ordenando a través de proporciones, patrones, sistemas, códigos y símbolos específicos, de tal manera que brota la vida en forma de materia, energías y almas. La Geometría Sagrada es el código que utiliza el Espíritu o Gran Arquitecto para crear la Vida, y así como existe en todas las creaciones de la naturaleza que podemos percibir, la encontramos también en las creaciones de muchas civilizaciones a través del arte, la arquitectura, el lenguaje, la ciencia, la música, etc.
La Geometría Sagrada se ha practicado desde hace siglos y su conocimiento ha estado vinculado con las civilizaciones y manifestaciones culturales más importantes de nuestra época: los egipcios, los griegos, los renacentistas, los mayas, los teotihuacanos, los hindúes, chinos, persas y, actualmente, la comunidad científica, entre otros. Es el lenguaje de la vida que diferentes culturas han imitado y adoptado para crear sus manifestaciones artísticas y de conocimiento. No fue creada por una sociedad específica sino que ha sido usada por diferentes sociedades en diferentes tiempos que observaron la matemática de la vida y la reprodujeron. Es un código que pertenece a la humanidad misma pues todo en la vida natural es creado por los principios dados en el universo.
Los grandes griegos como Pitágoras, Sócrates y Platón fueron exponentes perfectos de este lenguaje. De ahí se deriva el nominativo de “Figuras o sólidos platónicos” aunque los egipcios ya lo enseñaban miles de años antes y fue además la fuente de los griegos.
La utilizaron genios del arte y de la ciencia como Leonardo Da Vinci, en cuya obra, que trascendió el tiempo y el espacio, La Mona Lisa, dejó este lenguaje alegórico y simbólico abierto solo al ojo y el corazón desarrollado.
Esto es la Gnosis, que encierra el conocimiento y la sabiduría cósmica universal. El lenguaje sagrado del simbolismo que usa a la Geometría Sagrada quedó plasmado en las antiguas enseñanzas; tal es el caso de la parapsicología, la mitología de todas las antiguas comunidades, imperios y épocas, y la metafísica.
A la Geometría Sagrada se la intuye, se la percibe, reposa en el dinamismo de los colores, formas y sonidos, cualidades que poseen vibraciones propias. Cuando se accede a este lenguaje gracias a unaevolución espiritual, producto de la experiencia, se logra la sabiduría.
Sólidos platónicos
Platón definió las 7 formas principales dentro de la Geometría Sagrada: los 5 sólidos platónicos, el círculo y la espiral.
Los 5 sólidos platónicos son el tetraedro, el cubo, el octaedro, el dodecaedro y el icosaedro. Son formas completamente simétricas que tienen todos los lados iguales, todos los ángulos iguales, de las mismas medidas y los 5 caben dentro de la Matriz Universal que es la esfera.
El tetraedro es un triángulo con base: representa la conciencia del fuego. Tiene 6 aristas, 4 caras triangulares, 4 vértices. Símbolo de la sabiduría por representar al fuego sagrado, el primer elemento.
El cubo tiene 12 aristas, 6 caras cuadradas, 8 vértices representando el secreto del mundo natural. Es la conciencia de la tierra, es la experiencia de lo que ha nacido de la naturaleza.
El octaedro, de 12 aristas, 8 caras triangulares, 6 vértices. Es el aire, es como 2 pirámides invertidas, unidas en sus bases. Simboliza la perfección de la materia por el espíritu.
El dodecaedro, con 30 aristas, 12 caras pentagonales, 20 vértices, representa el quinto elemento (éter, prana, chi). Considerado el poder femenino de la creación y la forma madre.
El icosaedro, con 30 aristas, 20 caras triangulares, 12 vértices, es la conciencia del agua. Representa la semilla de la vida, la forma del universo, es lo masculino.
El círculo integra aquellas formas diferentes entre sí para interrelacionarlas en la unidad. El centro verdadero del círculo es un punto, pero el punto carece de dimensión y de lugar por lo tanto escapa a nuestra percepción y capacidad de manifestación. No pertenece a nuestro mundo, donde todo tiene extensión, dimensión forma; el punto pertenece a otra escala del ser. Es metafísico en el sentido más literal. El punto simboliza la unidad, la totalidad, la perfección. El punto lo contiene todo, solo que en potencia, no manifestado. De él nacen el círculo y la esfera que son las formas en las cuales se revela el punto. Lo que en este es todavía potencia metafísica cobra configuración formal en el círculo y la esfera. Todos los cuerpos platónicos son distintos y en realidad constituyen la unidad (la esfera). Se trata, pues, de una progresión infinita.
La espiral es otra de las formas de lenguaje de la luz; es la figura geométrica que genera el corazón cuando ama. La espiral femenina nos permite recibir información del cosmos. La masculina proyecta nuestra energía para abarcar toda la vida allí donde se encuentre. La espiral une todos los cuerpos geométricos y los hace viajar en el espacio. Por lo tanto, cada sólido platónico es una nave de conciencia.
Existen 2 espirales: la Áurea y la Fibonacci.
La áurea es una espiral cósmica, como nuestra galaxia, no tiene principio ni fin.
La de Fibonacci comienza en punto determinado, es decir, en nuestro corazón, y se une en el espacio con la áurea. De esta manera, el amor es la inteligencia que conecta con la gran sabiduría del universo.También nuestro cuerpo sigue el desarrollo de la Fibonacci. El ADN tiene forma de espiral.
Los mantras (cantos) tienen interiormente la estructura de la espiral. Por eso se necesita repetirlos, ya que con la repetición se va formando la espiral en el espacio. La espiral Fibonacci es utilizada por toda la naturaleza para crecer: girasoles, caracoles, piñas de árboles, etc.
Las matrices utilizadas en Tíbet y en otros lugares, denominadas Mandalas, son un sistema de estructuras geométricas ensambladas que crean un conjunto de estímulos y representaciones de colores y formas que actúan en el observador como concentrador y generador de energía brindando inspiración; son un despertador hacia niveles de conciencia superior, puertas de conexión con el más allá. Descubrir sus códigos es encontrar las llaves que nos reconectan con la luz superior que habita dentro, para comprender y experimentar que formamos parte de una conciencia superior.
Patrones de Geometría Sagrada
Desde el nacimiento de nuestro planeta, la red que rodea a la tierra estaba conformada por una matriz de geometría sagrada, que consiste en enrejados que cubren nuestro planeta, nuestro cuerpo, nuestros lugares, nuestras células, átomos, y modulan la energía-luz que sostiene y crea las formas. Son de origen cristalino e invisible, ya que se mueven a la velocidad de la luz. Estas estructuras constituyen lo que se conoce como lenguaje de la luz. El lenguaje de la luz es una manera de recibir información y energía con el fin de facilitar nuestro desarrollo. Es un método de aprendizaje sin necesidad de libros o intelecto.
Los patrones de tiempo están cambiando, los climas sufren variaciones y las rutas de migración de las aves han cambiado. Las ballenas y delfines se atoran en las playas con más frecuencia en los 14 años que siguieron a la convergencia armónica. El campo electromagnético de la tierra también está cambiando y lo hace con muchísima rapidez. La vieja red cristalina se desvanece y una nueva matriz cristalina se está formando. Somos parte de la nueva formación cristalina.
La geometría sagrada de la red contiene los patrones de energía de la Flor de la vida, el código o matriz holográfica que el espíritu universal diseñó para poder crear y manifestar todo lo que existe en el universo. Este código es el patrón original a través del cual la vertiente divina crea, expande y desarrolla absolutamente toda manifestación de vida. Todo lo que existe, todo lo que es, nació y nacerá a partir de esta matriz divina.
De acuerdo con Drunvalo Melchizedek, Tot le habría revelado que:
“La Flor de la Vida contiene dentro de sus proporciones todos y cada uno de los aspectos de la vida que existen. Contiene cada fórmula matemática, cada ley de la física, cada armonía de la música, toda forma de vida biológica incluyendo tu cuerpo específico. Contiene cada átomo, cada nivel dimensional, absolutamente todo lo contenido en universos de forma de onda”.
La forma más común de la “Flor de la Vida” es el patrón hexagonal (donde el centro de cada círculo está en la circunferencia de seis círculos alrededores del mismo diámetro), compuesta por 19 círculos completos y 36 arcos circulares parciales, rodeados por un círculo grande.
El símbolo de la flor de la vida ha sido venerado por las culturas en todo el mundo a lo largo de la historia como un símbolo de la esencia de la vida.
Los patrones geométricos y estructuras que contiene se llevan a cabo para ser una fuente constante de vida y han facilitado diversos diseños en todo el cosmos. Las distancias entre las estrellas, lunas y planetas, las proporciones del cuerpo humano, los arreglos del cono del pino y otras configuraciones biológicas, todos reflejan los orígenes en la imagen divina de la Flor de la Vida.
La “Flor de la Vida" puede encontrarse en todas las religiones principales del mundo. Contiene los patrones de la creación como salieron del “Gran Vacío”. Todo está hecho desde el pensamiento del Creador.
En Egipto, el templo de Osiris en Abydos contiene los más antiguos ejemplos conocidos de la Flor de la Vida.
En la India también aparece en el paseo alrededor del Templo de Oro, o Harmandir Sahib, uno de los santuarios más sagrados de la religión Sikh.
En China, a la entrada de la Ciudad Prohibida –un antiguo palacio imperial en Beijing, que fue construida en la década de 1400– se puede ver la misma Flor de la Vida bajo las garras del perro de Fu, uno de los llamados “Leones Guardianes”.
El antiguo círculo de piedra de Stonehenge simboliza la flor de la vida completa, el patrón geométrico hexagonal en que se basa la red de energía natural de la Tierra.
También se encuentra en Islandia, Turquía, en Inglaterra en los círculos en las cosechas, Israel, Tíbet, Grecia, Japón, España, Suecia y Yucatán, México.
Una porción de la red mundial, que invisiblemente rodea el planeta. La red se basa en la Flor de la Vida completa y el hexágono/hexagrama. El diámetro del primer círculo se calculó mediante la elaboración de una línea de Orkney a Stonehenge (casualmente la línea pasa la capilla Rosslyn que está exactamente en el centro, esto podría ser la verdadera ‘línea rosa’). Todos los sitios antiguos de Europa (círculos de piedra que simboliza la flor) se pueden encontrar en una de estas líneas. La red también une todos estos sitios antiguos. Muchos de los sitios sagrados más antiguos se encuentran en el centro de seis puntos.
Los egipcios, Atlantes, esenios, Mayas, conocían perfectamente este holograma y lo utilizaban para sanar y restaurar cualquier parte desarmonizada, empleando la intención y pensamiento adecuados, restableciendo el orden, el rejuvenecimiento y la perfecta salud en sus cuerpos físicos y etéricos.
Este patrón es una parte íntima de la naturaleza. Un árbol frutal hace una pequeña flor, la que pasa por una metamorfosis y se vuelve una fruta. La fruta contiene en ella misma una semilla, que cae a la tierra y crece como otro árbol. Entonces hay un ciclo de árbol a flor, a fruto, a semilla, y de regreso a árbol de nuevo, en esos cinco pasos. Es un milagro absoluto. Esto sucede junto a nosotros, todo el tiempo, y es tan normal, que simplemente lo aceptamos, y no pensamos mucho al respecto. Estos cinco pasos simples, milagrosos, en el ciclo de la vida, son paralelos a las geometrías de la vida.
La flor completa también contiene el cubo de Metatrón en tres dimensiones que a su vez contiene todos los sólidos platónicos. No sólo los componentes básicos de la vida, sino los componentes básicos de la creación misma.
Los patrones Geométricos Sagrados de la creación se están volviendo a descubrir y a través de la Geometría Sagrada –contactándola y trazándola– encontramos el equilibrio y la armonía existentes en todos los aspectos de la vida y de nuestras relaciones.
AUTOR: Margarita Rosa Londoño, Redactora GHB