Los ángeles son conocidos como seres de luz. Y aunque muchas veces esa expresión se refiere a su cualidad de seres iluminados y portadores de gracia, su relación con la luz no solo se ha percibido como metafórica sino también como literal. Cada uno de los rayos que emite la luz al pasar a través de un prisma se le ha asignado a un ángel encargado de ayudar al ser humano a evolucionar mediante las propiedades de cada color del arco iris.
Los colores y la sanación
¿Alguna vez has notado que hay días en que sientes la necesidad de usar ropa de cierto color? Este instinto humano es una forma natural de utilizar las propiedades espirituales de los colores. Los seres humanos han usado el color y su energía para sanar desde la antigüedad. Se sabe que los egipcios hacían curaciones con color que quedaron registradas en los antiguos papiros.
Los chakras y los colores
A los puntos de energía del cuerpo humano se les llama chakras. En los chakras se procesa la energía que ayuda al cuerpo a mantenerse en balance físico y espiritual. Los chakras principales son 7 al igual que los colores de la luz refractada. Cada rayo de color corresponde a un chakra y se puede utilizar, con la ayuda de los arcángeles, para sanar el cuerpo y el alma.
Los rayos de colores y los arcángeles
La Biblia menciona “las siete llamas ante el trono de Dios” que se asocian con los siete arcángeles. No es por casualidad que el número siete aparece muchas veces en la Biblia y otros textos religiosos. La naturaleza refleja la importancia de este número sagrado en manifestaciones como el arco iris y las notas musicales. Al ser todo parte de la Creación Divina, las manifestaciones del mundo material y espiritual están unidas. Por eso se asocia a cada uno de los arcángeles celestiales con un rayo de luz refractada y los regalos sanadores de ese color:
El color rojo pertenece al arcángel Uriel
El color naranja pertenece al arcángel Gabriel
El color amarillo pertenece al arcángel Jophiel
El color verde pertenece al arcángel Rafael
El color azul pertenece al arcángel Miguel
El color índigo pertenece al arcángel Raziel
El color violeta pertenece al arcángel Zadquiel
Los chakras más altos
Las combinaciones de los colores del arco iris con la luz blanca también tienen ángeles encargados y propiedades sanadoras. Existen además chakras asociados con estos rayos de colores pasteles. Estos chakras se extienden más allá del cuerpo y son portales a dimensiones profundas de la existencia.
El color blanco pertenece al arcángel Metatrón y al arcángel Gabriel
El color rosado pertenece al arcángel Chamuel
El color turquesa pertenece al arcángel Haniel
El color lila pertenece al arcángel Tzaphiel
El ángel de los colores de la naturaleza
La naturaleza despliega una gran gama de colores. Estos colores están a cargo del arcángel Sandalfón, que los utiliza para sanar el mundo y a sus habitantes. Este ángel ayuda a los sanadores a distancia y fomenta el reconocimiento del mundo natural como recurso de energía sanadora. Sandalphon es también es un ángel de energía femenina, como la Tierra. Su conexión a la Madre Tierra provee un canal entre la gracia divina y la vida terrenal para los habitantes del planeta mediante sus colores.
Melchizedek y el proceso de ascensión
Aunque los colores de los ángeles pueden utilizarse para sanar desajustes físicos, el propósito principal de quien embarca en su estudio es cultivar el “proceso de ascensión”. Los ángeles y arcángeles celestiales dirigen el amor de Dios y su fuerza vital con el propósito de desarrollar los chacras del cuerpo y los otros chacras que se expanden hacia el mundo espiritual. Mediante el proceso de ascensión se logra desarrollar la conciencia hasta reconocerse como un ser espiritual cuyo propósito es liberar y sanar a todos los otros seres.
Melchizedek es el ángel encargado de fomentar este proceso. Él ayuda al ser humano a desarrollar su cuerpo de luz, también llamado “cuerpo de luz merkavah”, para llegar a la iluminación.
A los estados que llega el cuerpo de luz desarrollado se les llama cuarta y quinta dimensión. Esto quiere decir ir más allá del cuerpo físico de la tercera dimensión (anchura, altura y profundidad) para llegar al mundo del espíritu. En este proceso se llega a reconocer al Espíritu como la fuerza que conecta a toda la creación.
Cómo te ayudan los colores de los ángeles
Cuando meditas con cada color, los ángeles que guardan los rayos reciben tus deseos de desarrollar o sanar el área de tu vida que corresponde la energía de ese color. Al invocar al ángel correspondiente, recibes las energías sanadoras del rayo de luz y su energía sutil en tus chakras. Con el tiempo y la práctica, tu cuerpo de luz se desarrolla y el velo que divide lo terrenal de lo espiritual se hace más transparente.
Al cultivar el conocimiento de las propiedades de los colores de los ángeles, sanas tu vida e impulsas tu ascensión espiritual. No solo eso: tu trabajo para convertirte en un ser de luz ayuda al mundo entero a sanar.
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