No estamos aquí sólo para cambiar nuestra ira, las cosas que hemos hecho que han herido a otros, o el dolor que hemos causado en la vida de otras personas. Estamos aquí para entender que es a través de acciones como éstas que creamos un vacío en nuestro ser que la Luz no puede llenar. Cuando nos damos cuenta verdaderamente de este punto y asumimos responsabilidad por nuestro propio vacío interno, podemos atraer una inmensa cantidad de estabilidad, conciencia y Luz a nuestra vida.
El día de hoy, dedica unos cuantos minutos para reflexionar en este concepto. Luego, cuando estés listo, puedes pedirle al Creador algo como esto: “Ya no quiero ver lo negativo como algo fuera de mi ser, sino más bien, quiero obtener la conciencia de que todo lo que hago crea mi propia negatividad, mi propia enfermedad, mi propio sufrimiento y mi propio dolor. Todo lo anterior es causado por mí solamente y por mis propios actos hacia el mundo exterior”.
Si realmente podemos absorber esta idea, entonces podemos cambiar una gran parte de la negatividad que nos rodea y que llena este mundo.
Karen Berg
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